Hace unos días se confirmaba la noticia de que la liga profesional de fútbol inglés, mejor conocida como la Premier League, iniciaría una campaña en apoyo a la comunidad LGBTQ+ en los partidos disputados entre el 29 de noviembre y 5 de diciembre. Debido a la campaña, los capitanes de los equipos debían lucir un brazalete arcoíris como muestra de solidaridad con los miembros del colectivo, hecho que generó dos controversias.
La primera polémica fue protagonizada por el futbolista Sam Morsy, capitán del Ipswich Town, el cual se negó a usar el brazalete arcoíris por motivos religiosos. A pesar de haber nacido en el Reino Unido, Morsy es musulmán, razón por la que no usó el brazalete durante la jornada, siendo el único de los 20 capitanes de la Premier League en salir a jugar sin la cinta multicolor en su brazo.
La segunda controversia vino de la mano de Marc Guehi, jugador del Crystal Palace, el cual sí usó el brazalete arcoíris, pero decidió escribir sobre él la frase “Amo a Jesus”. Al igual que Morsy, Guehi es creyente, y pertenece a la religión del cristianismo, motivo por el que escribió el mensaje.
En Inglaterra se comenta sobre la posibilidad de que Marc Guehi sea sancionado por escribir la frase en su cinta de capitán, debido a que la Football Association no permite una serie de “lemas/emblemas de iniciativas” de esta índole.
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Fuente: Marca
