En Licán Ray, pueblo ubicado en Chile, una pareja lésbica denunció que durante su estancia en una cafetería llamada “Il golosso”, fueron expulsadas por el dueño del local por darse un beso.
Una de las victimas relató: “El día domingo 27 de julio a las 18:00 hrs, mi polola y yo acudimos a la cafetería «Il Golosso» en el centro de Licán Ray, con la intención de tomar algo y disfrutar la tarde. Mientras esperábamos nuestro pedido sentadas, conversábamos sobre el trato violento y despectivo que el dueño del local tenía hacia su esposa, gritándole y hablándole como si fuera cualquier cosa”.
La mujer agregó: “nos dimos un pequeño beso (un «piquito»), sin ninguna intención de incomodar a nadie. A los pocos segundos, el dueño se acercó directamente a nosotras y nos dijo, de manera abrupta, que en su local no permitiría «ese tipo de conductas», «besitos aquí no». Al preguntarle si se trataba de una broma, confirmó que en su local no, y que eran sus políticas”.
La expulsión de la pareja del local por parte del dueño fue grabada por una de las afectadas, para posteriormente ser difundido en las redes sociales como prueba de lo sucedido.
El Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), denunció el hecho por discriminación a la orientación sexual, acto que es ilegal según la Ley Zamudio y la Ley del Consumidor en Chile.
“Negar cualquier servicio o producto en razón de la orientación sexual es una ofensa y humillación gratuita, por lo que animamos a las afectadas a iniciar acciones legales contra el responsable de este abuso, quien de comprobarse los hechos en tribunales debería ofrecer disculpas y eliminar toda política que legitime la homofobia, además de ser multado”, comunicó el Movilh.
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