La cámara baja del Parlamento de Rusia aprobó el 12 de noviembre una ley en la que se prohíbe la adopción de niños a personas que vengan de países en los que el cambio de sexo esté permitido, como Canadá, Países Bajos, entre otros.
El presidente de la cámara de diputados, Viacheslav Volodin, comentó: “Tenemos que proteger a los pequeños que no pueden protegerse a sí mismos”. Además, Volodin calificó las políticas de occidente como destructiva para los infantes y añadió que el proyecto de ley tiene como finalidad imposibilitar la adopción de niños rusos por parte de representantes de las comunidades LGBTQ+.
Sumado a esto, el Parlamento ha presentado un segundo proyecto de ley en el que se prohibiría la propagación de contenido que promueva a las personas a no tener hijos, llamándolo “Propaganda sin hijos”. En caso de incumplir esta ley se podría sancionar con una multa de hasta cinco millones de rublos.
Con estas nuevas leyes, la política rusa ha dejado claro su postura contra las personas de la comunidad LGBTQ+, estableciendo un rechazo a todo lo que tenga que ver con el colectivo.
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Fuentes: Infobae y GCN
