Un nuevo estudio internacional pone foco en las juventudes LGBTQ+ y como su experiencia educativa puede verse afectada por culpa de elementos como el acoso escolar, aislamiento y discriminación dentro de las escuelas.
La investigación, realizada por la organización Bridge entre más de 900 personas LGBTQ+, revela que el acoso en las aulas se intensifica durante la adolescencia temprana y con frecuencia va acompañado de exclusión social por parte de sus pares.
Según el director fundador de Bridge, Prithviraj Nath, muchos jóvenes se ven forzados a dejar la escuela debido a este ambiente hostil, perdiendo así oportunidades educativas y comprometiendo su perspectiva de empleo y estabilidad futura.
Este fenómeno no es aislado: informes educativos globales muestran que más de la mitad de estudiantes LGBTQI+ han experimentado acoso escolar en base a su orientación sexual o identidad de género. La UNESCO, por ejemplo, encontró que una proporción significativa de jóvenes LGBTQI+ ha sido objeto de intimidación verbal y social dentro de los centros educativos, y que la falta de intervención de docentes y personal escolar agrava el sentimiento de inseguridad.
Ante esta realidad, activistas, organizaciones educativas y defensores de la diversidad hacen un llamado urgente a políticas educativas inclusivas, formación docente especializada y mecanismos de protección efectivos, para que todas las infancias y juventudes, sin excepción, puedan estudiar, desarrollarse y sentirse seguras en sus escuelas.
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